Elder Scrolls
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3 de Fuego hogar, 200 de la Cuarta Era
¿Sabes? Cuando crees que has tocado fondo, a veces los aedras te echan un cabo. Desde que los rebeldes tomaron el control de las minas por estos lares, no he podido encontrar trabajo. Y de repente aparece Bern, mi antiguo compañero, con el título de propiedad de una antigua mina de oro perdida en las montañas. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que trabajamos juntos. ¿Cuánto? ¿Cuatro años? Es agradable trabajar con alguien que conoce bien la profesión, y parecía que el sitio era una ganga.



22 de Fuego hogar, 200 de la Cuarta Era
N letteradie vende una mina por cuatro cuartos. Imaginaba que el lugar estaría en mal estado, pero no tanto... Es poco más que una cueva. Puede que aquí hubiera oro alguna vez, pero ahora no hay ni una veta en la que empezar. Picamos al azar. Durante tres semanas excavamos el túnel inferior, pero no apareció nada.



15 de Primera semilla, 201 de la Cuarta Era
N letterada. Ni oro, ni gemas, ni mineral, ni una piedra útil... Las rocas de por aquí se desmenuzan en cuando las apilas. Yo quiero dejarlo ya, pero Bern insiste en seguir adelante. "Solo un poco más, Hadrir". "Estamos muy cerca, Hadrir". ¡Bah! Bern quiere que vuelva a Riften a por suministros la semana que viene. Me sentará bien para relajarme un poco.



29 de Primera semilla, 201 de la Cuarta Era
H lettere vuelto, y nada. Ni rastro de Bern. Es como si se hubiera largado sin más. No hay sangre, ni signos de lucha, simplemente me ha plantado, supongo.

He esperado tres días y no ha vuelto. Yo regresaré a Riften a ver si lo encuentro o si consigo otro trabajo. No tiene sentido perder más tiempo aquí.

Bern, si encuentras esto, esperaba más de ti.
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